lunes, 24 de febrero de 2014

Presentación en Móstoles de Un mañana para Alicia



Esta semana vuelve a presentarse en la Comunidad de Madrid Un mañana para Alicia. En esta ocasión será en Móstoles y allí estaré con algunos de mis compañeros de relatos para firmar un montón de ejemplares. Y para pasar una tarde que promete ser intensa. Por fortuna, aunque los que debieran cuidar de nuestros dineros no lo hacen, siempre estaremos ahí para ayudar a gente como la familia de Alicia. Ya solo nos queda luchar para que estos actos solidarios no tengan que repetirse con tanta asiduidad como en estos tiempos que nos han fabricado, que casos como el de Alicia sean subvencionados con el dinero de la sanidad pública, la de todos y para todos. Sí, ese dinero que se llevan a las cuentas suizas, ese.
Por último, quiero mencionar una vez más a Julia Zapata, la impulsora de todo esto. Eres genial. Muy orgullosa tiene que estar la familia de Alicia de tenerte como amiga.

Si os podéis acercar por la biblioteca de Móstoles este jueves por la tarde estaremos encantados de saludaros. ¡Os esperamos!

martes, 18 de febrero de 2014

Significados



Era el último significado. Empezaron por democracia. Lo borraron de todos los diccionarios sin que nos diésemos cuenta, solo nos enteramos cuando comenzamos a no entendernos. Las palabras seguían ahí, sobre las páginas, las paredes o las pantallas, pero ya no nos servían para comunicarnos. Corrupción, alegría, hambre, honesto… fueron las siguientes que se quedaron vacías; así hasta que llegaron a miedo: no quisieron eliminarlo. Nos habíamos recluido en nuestras casas. Ellos no, ellos pretendían adueñarse de las calles y de nosotros. Yo, antes de que desapareciese la definición de pensar, me escondí en este sótano con un viejo y enorme tomo que heredé de mi padre. Ya voy por más de la mitad. Han revivido muchas palabras. La próxima es educar. Después va combatir.

martes, 11 de febrero de 2014

Juegos


Juegos

La primera vez sentí ansiedad. No paraba de moverse el cajón, como si quisiera abrirse. Duró cuatro o cinco minutos. La noche siguiente ocurrió lo mismo; en cuanto lo guardé. Esperé unos instantes, y lo saqué para dejarlo encima de la mesilla. Tuve que hacerle hueco entre la lamparita, el vaso de agua y los pañuelos de papel. Se tranquilizó.
En una semana no volvió a suceder nada raro. Ayer, al quitarme las gafas, noté que se ponía nervioso; pensé que igual quería que lo metiese entre las sábanas, conmigo. Me dio lástima, pero no lo creí conveniente. Hasta que nos dormimos, no dejaron de susurrarme sus tapas.
Esta noche huele a un perfume distinto, más sensual. Incluso me parece que ha dejado escapar de entre sus páginas, por un instante, el bajo de un picardías de seda de color negro.

jueves, 6 de febrero de 2014

Reseña de La sombra de las horas en el blog El Lado Frío de mi almohada.



Tizire, estos días he paseado por Facebook y por Twitter de la mano de tu reseña y me faltaba traerla a mi casa. Ya estamos aquí.
 
Hace casi dos años, el 14 de febrero de 2012, que mis sombras me regalaron la primera reseña en la estantería que veis justo ahí arriba (me he decidido a hacer un dibujo con el lápiz y el editor de fotos; me apetecía, lo siento…)  y en este tiempo he tenido la fortuna de ir completándola; aún me queda espacio pero no sé yo si el peso de cada una de ellas me va a permitir continuar llenándola sin peligro de que el corazón aparezca en los pies… 11 reseñas que me han dado la oportunidad de aprender de vuestras opiniones para intentar crecer. En cada una de ellas he podido encontrar algo que quizá por mí mismo no hubiese visto. Me reafirmo en gritar a los cuatro vientos la importancia de vuestros blogs para nosotros, los que andamos peleando (sin puños) con las letras.
 
Gracias por tus palabras, Tizire, por lo acertado de las fotos que las acompañan y por el cariño que has ofrecido a mis sombras. Os invito a leer la reseña en El Lado Frío de mi Almohada y, de paso, a echar un ojo (¡o mejor los dos!) al blog de Tizire.

Irma o esa persistente calle de París