Esta
entrada es muy, muy especial. Me va a ser imposible deciros todo lo que siento,
por espacio y porque creo que todavía no se ha inventado un idioma que pueda
escribir directamente el corazón. O él no lo conoce.
Han
pasado poco más de cuatro meses desde que colgué mi primera entrada aquí. Desde
que me decidí a entrar en este mundo que para mí era completamente desconocido
¡y montar un blog! Nunca he sido de los que odian cualquier cosa relacionada
con la informática, pero sí de los que les daba pereza construir todo esto.
Pero sabía que era la única forma que tenía de dar a conocer mi libro de
relatos que ya había decidido publicar (autoeditar) en la editorial Círculo
Rojo. Estuve mirando aquí y allá, viendo blogs de literatura, enterándome de
cómo se formaba un blog. ¡Y me vi metido de lleno en la blogosfera
literaria! Ya sin posibilidad de salir.
Bueno,
aquí ya debe aparecer mi hermana Koncha, y por supuesto Kafeto, con su blog. Los dos,
perdón, los tres, solitos en este enorme agujero negro, rodeados de expertos
blogueros con sus bitácoras repletas de historias, de portadas de libros, de
poemas, de imágenes, de seguidores, de citas magistrales, de excelsos
escritores… Y Koncha, y por supuesto Kafeto, y Román, porque me llamo Román aquí,
jaleándose mutuamente las ocurrencias que tenían. Una entrada, un comentario.
¡No!, no es así, en honor a la verdad eran dos comentarios: el que me hacía mi
hermana, y por supuesto Kafeto, y mi respuesta. Y al contrario en su blog, y
por supuesto el de Kafeto. De vez en cuando aparecía un anónimo, o un familiar,
o un amigo. ¡Y mira que daba la lata para que se hiciesen seguidores y se
pasasen a comentar en mi blog! Vale, vale, que no me quejo, que lo habéis hecho
y estáis ahí, que estoy hablando del principio, cuando me caí en el agujero y
pensé que nunca iba a salir de él, pero porque me perdería, no por otra cosa. Ahora
sí sé que nunca voy a salir de este luminoso agujero negro. Porque yo,
Román, y Koncha, y por supuesto Kafeto, hemos encontrado en él un montón de
amigos, de momento virtuales, y un montón de alegrías, de sentimientos, de
esperanza, de… ¿Lo veis? Lo que os decía al principio. Aquí ya he perdido
muchas palabras entre mi cerebro y mis yemas de los dedos. Yo quiero escribir
más, muchas más y se me han quedado en el corazón porque en este idioma tan
maravilloso que tenemos, el castellano, no existen, o él no las conoce. ¡Y
ahora el espacio! ¡Que no puedo ocupar todo mi blog con una entrada! Que
los que te están leyendo se están ya hartando un poquito. Ellos también tienen
que elaborar sus entradas y no van a estar aquí todo el día. Venga, chico, ve acabando
ya…
¡Gracias Margari por la extraordinaria
reseña que has dedicado a mi libro de relatos! Es la primera y ha sido un honor
para mí que tu blog Mis lecturas y más cositas, uno de los que cuando comencé
a mirar por aquí me hicieron pensar en la retirada (¡dónde voy yo metiéndome
entre estos profesionales!, pensaba), haya prestado un cachito de él para mi
libro. Y gracias por cómo has expresado lo que has sentido leyéndolo. Y gracias a todos vosotros, amigos blogueros, por vuestros
comentarios. Cuando mi corazón haya aprendido, por fin, nuestro idioma, os
prometo que escribiré otra entrada. No quiero nombrar a nadie porque seguro que
olvidaría a alguno, esta vez la culpa es de las neuronas, y no me gustaría que
así fuese.
Sé
que mi blog no deja de ser un pequeño puntito blanco entre toda esta
constelación de estrellas y que mi libro navega entre un millón de compañeros
de viaje. Pero también sé que lo que siento y logro plasmar en un papel, o en
la pantalla de cualquier ordenador, a alguien le puede servir para disfrutar un
ratito mientras lo lee. Y eso es mucho para mí.
Solo
me queda deciros que Román, Julio y Luis Miguel están muy felices de haberse atrevido
a dar este paso.
¡Ahí queda eso! Firmado: El gato sabio. Muááássss.
ResponderEliminar¡Gracias, Kafeto! ¡Otro muás para ti y para mi hermana!
EliminarHace menos de dos meses inicié la andadura de mi Blog. Al principio, un poco para que me sirviera de carpeta virtual a mis escritos y, de paso, dar a conocer mis sentimientos, mis ideas...mis incertidumbres. Gracias a él he conocido a un montón de gente buena, más que virtual por supuesto, y entre ellos a Concha, Kafeto Margari,y tu, Román. Sólo por esto y por todos los seguidores que me apoyan y me soportan merece la pena haber abierto este espacio que es mi casa y la vuestra también.
ResponderEliminarUn abrazo, Román.
¡Gracias, Pedro Luis! Pues sí, la verdad es que es una suerte, por el motivo que sea, haber entrado en este mundillo. ¿Verdad, amigo?
EliminarUn abrazo muy fuerte.
Perdón por entrometerme en el blog de mi hermano, pero creo que debo corroborar las palabras de Pedro, al tiempo que agradecemos, mi minino y yo, su generosidad y ofrecimiento. Yo abrí mi blog en 2008, aunque su verdadera explosión se registró, por culpa de Román, el pasado invierno. En este pozo sin fondo de relaciones virtuales, se palpa la calidad humana de un montón de compañeros blogueros. Me alegro un montón de haberme reenganchado(gracias Luismi) y grandes besos para todos.
EliminarDe nada hermana, porque estoy convencido de que Kafeto y tú solo necesitábais un empujoncito. Y sin vosotros mi blog no hubiese sido el mismo. Muases.
EliminarEhnorabuena, espero que sea la primera de muchísimas más.
ResponderEliminarBesos.
¡Gracias, Pilar, por tus deseos!
Eliminar¡Un besazo!
¡Felicidades! lei la reseña de Margari y me gustó mucho
ResponderEliminarbesos
¡Gracias, Tatty! A mí todavía me dura la emoción de las palabras de Margari. ¡Un besazo!
EliminarQuerido Luismi, digo Roman.
ResponderEliminarLo primero que quiero es darte las gracias por ser tan pesado y por insistir para que nos pasáramos por aquí y nos hiciéramos seguidores del blog. Sí, es verdad que me costó un poquito, demasiadas cosas que hacer y muy poco tiempo libre para dedicarle al ocio. Pero gracias a tu insistencia he descubierto un mundo que me está encantando. Yo, lectora empedernida, no tenía ni idea de lo que se movía por la blogosfera y resulta que me encanta. He descubierto un montón de gente que sabe mucho de libros, que me descubre poesías y poetas que no conocía o me trae otros que despiertan agradables recuerdos. He descubierto a muchos escritores autoeditados como tú que tienen mucho que decir y me encanta descubrir. Y por supuesto tu blog y el de Concha, con vuestros relatos y poesías me haceís pasar un buen rato.
Aunque sigo teniendo poco tiempo, aprovecho cualquier hueco en el trabajo para darme una vuelta por aquí y en casa cuando me siento ante el ordenador me engancho a estas páginas y mis otras aficiones se quedan abandonadas.
!Felicidades por tu blog y por tu libro!
Muchos besos.
Paloma
Gracias, Paloma, por la parte que me toca... ¡y hoy ya van dos intromisiones en esta entrada! Pero es que se pasa muy bien por aquí, con tanta gente estupenda que intercambia pensamientos, sentimientos, vivencias, ocurrencias... Un beso.
Eliminar¡La que me está liando Orange con la conexión! Bueno intentaré contestarte Paloma... y hermana.
Eliminar¡Gracias, Paloma! Me alegro un montón de haber sido pesado y haberte enganchado a este mundillo. ¿A que merece la pena? Ahora voy a volver a ser pesado: Y cuando tengas tu blog, más aún... Ya está, no sigo, todo llegará. Fíjate, ahora estamos más relacionados tú y yo por aquí que tu Jose y yo yendo a ver al Rayito. Solo falta que pillemos a María. ¿Tú crees que será posible? Y eso de que los desconocidos del mundo de la escritura lleguemos a una gran lectora como tú me hace una ilusión tremenda. Bueno, tenemos que juntarnos un día y hablarlo cara a cara. Y con Kafeto y Koncha la entrometida. Je, je. ¡Gracias, hermana, por entrometerte!
¡Un montón de besazos!
Concha estás en tu derecho a hablar por alusiones y efectivamente este intercambio resulta muy enriquecedor. Y por otro lado yo también creo que esto hay que hablarlo cara a cara, que hay tema aquí para hablar largo y tendido, incluido Kafeto por supuesto, que tiene que contarme que tal fue cierta aventurilla suya con una gatita negra.
EliminarBesos a los dos, perdón a los tres.
Hola, me vuelvo a entrometer: Paloma, queremos ver tu blog ¡yaaaaa! Y mi libreta queda a vuestra disposición para esa cita cara a cara. No estaría mal. Y si también incorporáis a María, pues, mejor que mejor.
EliminarY ahora Kafeto te dice en voz baja (para que no me entere yo) que sigue muy "enamorao" y que de aventurilla nada, guapa.
Un beso y un ronroneo.
Aunque te hayan faltado esas palabras que dices, se te entiende perfectamente.Es duro al principio cuando casi nadie (ni siquiera tus compañeros) comenta tus entradas,hasta que un dia, empieza a cambiar todo.Felicidades por tu libro y tu blog en el que uno se siente como en casa. Besos.
ResponderEliminarSivia
¡Gracias, Silvia! ¡Cómo me gusta que consideres este rinconcito como tu propia casa!
Eliminar¡Un besazo!
¡Gracias a ti Román! Que me hiciste sentir muy especial con tu libro! Y encima me has hecho disfrutar muchísimo con todas tus historias, con todos tus personajes... Y me alegro mucho que hayas tenido paciencia y perseverancia con tu blog. Que al principio siempre cuesta un poquito pero luego siempre sorprende. Y ya te estás convirtiendo también en un auténtico profesional!
ResponderEliminarBesotes!!!
Perdona, Margari, no es que te haya hecho yo sentir muy especial. Es que lo eres. Y no soy yo el único que lo dice. Por algo será, ¿no? Y lo de profesional... Con estos maestros todo se hace más fácil.
Eliminar¡Un besazo muy gordo!
Enhorabuena!! Me quedo por aquí. Un beso.
ResponderEliminar¡Muchas gracias, Olga! Encantado de recibirte por mi espacio.
Eliminar¡Un besazo!
Muchas felicidades!! Es la primera reseña pero en nada tendrás un montón.
ResponderEliminarBesos
¡Muchas gracias, Margaramon! ¡Un besazo!
EliminarFelicidades, lo primero, por la reseña. Ninguna, aunque sean más detalladas, más profesionales, o lo que tú quieras, se aproxima a la primera. Esa te hace tocar el cielo con los dedos porque, de algún modo, destapa lo invisible en este universo enorme que es internet.
ResponderEliminarTe voy a contar una cosa. Mi blog estuvo desierto más de dos años y un día, de repente, alguien desde México lo descubrió. Se llamaba Bárbara y me arrastró por este mundo virtual. Ella leyó mis libros, los reseñó la primera, los hizo visibles al otro lado del mar. El blog, como rebote, creció como la espuma y conocí a mucha gente, entre ellos ahora estás tú. Pero la vida, que es puñetera, me tenía una sorpresa. Un domingo abrí mi blog y vi la cara de Barby repetida a la derecha, donde coloco los blogs que sigo. Raro, muy raro. Entré en uno y creo que si no hubiera tenido visita en casa no hubiera podido mantener el tipo. Mi amiga, con 27 años, había muerto. Me hundí, entendí que el mundo virtual, donde las distancias no existen tiene algo de real. Me apoyé en otras blogueras que estaban como yo y ellas en mí. Por Bárbara seguí adelante, aunque no me apetecía nada. La novela que acabo de preparar, la tiene a ella en la dedicatoria.
No sé por qué te cuento esto, supongo que hace mucho que necesitaba decirlo, decir que Barbara, quien me "descubrió" no ha tenido tiempo de ver las cosas fantásticas que me están pasando.
Gracias por el hueco en tus comentarios.
¡Gracias, Mayte! Y gracias por aprovechar este "hueco" para contar algo tan doloroso. Sé que lo que dices de la primera reseña será así, tengo claro que ninguna otra va a superar la emoción de esta primera.
EliminarUn día, dando vueltas por los blogs, encontré el que me acabas de contar de Bárbara. Por supuesto no sabía tu relación con ella. Te puedo decir que me impresionó mucho, sin conocer nada de lo ocurrido. Además yo hacía poco que había colgado en este blog un relato que se me ocurrió leyendo una noticia en el periódico sobre la continuidad o no de un blog después de haber fallecido. Esto hizo que me impresionase aún más. Todos tenemos muchas personas queridas detrás, animándonos, y que ya no están con nosotros. De ahí, estoy convencido, es de donde tenemos que sacar las fuerzas para seguir adelante. No queda más remedio. Tenemos algo muy importante en nuestras manos: nuestra vida y las de los que nos rodean.
Gracias otra vez por habérmelo contado y un besazo muy gordo.
Hola Román, lo primero de todo pedirte disculpas por no haber entrado antes, lo cierto es que los días no se si lo sabes tienen solo 24 horas y claramente no me llegan, lo segundo darte las gracias por haberme visitado y hacerte seguidor, es un honor para mi, en este óceano de blogs, tan cultos y magistrales, que se fijen en lo humilde del mío y eso, la verdad me llega al corazón. Lo tercero felicitarte por tu libro, del que leí la reseña que puso nuestra amiga "margari" en su blog, quiero con el tiempo tener el placer de poder leerlo pero en papel, la cosa digital aún no va conmigo, llamamé si quieres "anticuada" pero no importa de hecho me gusta serlo. Tengo que decirte que mis lecturas son para los Clásicos en la mayoría de las ocasiones, que a base de leerlos y releerlos me han formado como persona, que lo contempóreneo, lo escojo muy " de vez" y muy " de encuando". Por que haya pocas cosas que lleguen a "sorprenderme" y se que piensas que es un poco prepotente por mi parte, pero es que soy así sincera. Muchos autores se basan en otros para realizar sus pequeños escarceos literarios, no quiero decir que sea este tu caso, por que aún no he tenido el placer de leer nada tuyo, y espero " sorprenderme".
ResponderEliminarTodo lo que has escrito en este post, lo sentí yo cuando me embarqué en la aventura blogger, hace apenas año y medio, estaba pasando por una época un poco depresiva y me dedicaba a lo que mas me gusta " darle a la tecla" a si que visitando unos y otros , me decidí hacer el mío, bueno los míos, pues, ya que me puse no puede parar y dediqué cada uno de ellos a aquellas pasiones que tengo en la vida, que son Leer y escribir,crear multitud de cosas con las manos, viajar, bucear en la olvidada historia de mi pueblo, y quejarme de la injusticia social. Y es en este mundo, donde encontré la salida para aquello que me afectaba, por eso le doy las gracias. Y te las doy a ti, otra vez por visitarme, y quedarte como seguidor, yo, me quedo por aquí con tu permiso, por que quiero "sorprenderme" todos los días. un abrazo y feliz semana, ( perdona por mi largo comentario, pero es que los cortos no me salen)
Perdonada por todo, aunque no tengo que perdonarte por nada. ¿De verdad que los días tienen 24 horas? Pues desde que estoy en este mundillo me da que no es así... No deben de pasar de 12. Había visto comentarios tuyos y me pasé por uno de tus blogs y me gustó. Yo creo que esa cita sobre las bibliotecas en Egipto me enganchó. Espero que algún día caiga en tus manos mi modesto libro de relatos, mientras tanto, si puedes echar un vistacillo y un comentario a algunos de los míos que cuelgo por aquí, me encantará. Picaré yo por tus blogs de vez en cuando. ¡Es que no tienes bastante con uno! Je, je. Todos tienen una pinta estupenda. Por cierto, ¡me gustan mucho los comentarios largos!
Eliminar¡Un besazo!
pues felicidades vas bien con tu blog.
ResponderEliminarPor cierto, si quieren enviar mensajes gratis desde la compu a celular entren si funciona http://www.textme4free.com/
Pues ¿muchas gracias!
EliminarHola Román, la verdad es que esto del mundo bloguero engancha un montón.
ResponderEliminarBesos
¡Que si engancha! Y es que sois gente tan maja que cuesta mucho cortar y dedicarse uno a la escritura. Dices: cómo no voy a dejar un comentario aquí. Y luego allí. Y... ¡se te han pasado dos horas en nada! Y encima te dejas un montón de sitios a los que ya no puedes llegar... ¡Voy a pedir que por Decreto ley alarguen cuatro o cinco horas el día! ¡Gracias, Marian, por pasarte por aquí!
Eliminar¡Un besazo!