MISCELÁNEA


Hoy os voy a sacar de la chistera tres temas. 

El primero, la entrega de premios del XII Certamen de Narrativa Corta Carmen Martín Gaite que fue fallado el  día 26 de octubre, con el siguiente veredicto:


    -Primer premio: 
Marcapáginas  (Jon Arza Pérez)

    -Segundo premio: 
El violinista que ascendió a las alturas  (Marina Infante Rodríguez)


Aún no se pueden leer los relatos ganadores en la página de la Agrupación, pero sí sabemos que la ceremonia de entrega de los premios tendrá lugar el día sábado 15 de diciembre a las 19:00h. en el salón de plenos del Ayuntamiento de El Boalo Plaza de la Constitución, 1  C.P.28413 (Madrid)  91 855 90 25. Os recomiendo que os acerquéis por la bonita localidad de la sierra de Madrid.


El segundo, otra entrega de premios, el OROLA de vivencias. 



Por segundo año consecutivo, Concha Morales nos llevó hasta la ceremonia con una vivencia suya merecedora del honor de formar parte de la Antología que edita la editorial:

MARY PAZ 
Como recién escapada de un cuadro de Lautrec
ofrece su sonrisa al por mayor,
guiño a guiño entre los baches de la acera.
¡Buenos días, niño! ¿Traes algo para mí?
Mary Paz balancea su cuerpo de otoño
mientras sueña en blanco y negro
con la niña de cuerpo flaco
que una noche apagó la luna para siempre.
Apoyada en el borde de la vida
fuma un pitillo sin humo,
e intenta recordar las certezas que nunca sucedieron.
La vieja casona de tejado rojizo,
el tazón de achicoria a la orilla de los veinte años,
las risotadas mezcladas con odio y limón
y el frío, el terrible frío en el cuerpo y en el alma,
de un motel de carretera.


Un encuentro ameno y en el que quiero destacar la presencia de la ganadora del segundo premio, la madrileña, de Villalbilla, María Casado. No nos conocíamos pero, gracias al ágape posterior, tuvimos la oportunidad de entablar conversación y os diré que hemos descubierto mi hermana Concha y yo una nueva amiga y escritora. Os dejo su vivencia para que la disfrutéis:

LA CAJA
Tenía ocho años y también una caja roja, grande y brillante donde guardaba los vientos.
Todos los vientos: esos ligeros y cálidos del verano, los huracanados que arrastran
todo a su paso, los gélidos y azules de enero, los frescos y olorosos que nos serenan,
los ciclones brutales... En fin, lo que decía, todos los vientos. El problema era que a mi madre
no le gustaba nada mi caja y decía que los vientos no se podían meter en una caja,
que no inventara historias raras, que ya era mayorcita para andarme con fantasías de niña.
Y un día se enfadó tanto conmigo, que me quitó la caja y para demostrarme
que no había vientos dentro la abrió de un golpe. Yo me tapé la cara con las manos
y encogí ml cuerpo.
Nuestra casa voló por los aires mientras nosotras nos agarrábamos al árbol del jardín. 


Y el tercero, una breve alusión al Festival Eñe que se celebró el viernes y el sábado pasados. Por mi parte, satisfacción por tener la oportunidad de entrevistarme con dos editores y que mi sombra de las horas haya podido llegar hasta sus manos y también a las de los otros dos editores que completaban el evento de “Cuatro editores en busca de autor”. Por mí, que cesen la búsqueda… 

Y otra enorme satisfacción fue poder oír a Pilar del Río hablar de su, nuestro, José Saramago como si estuviese compartiendo espacio con nosotros. Imborrable. Pero de esto y del festival ya os hablaré más despacio en otra ocasión.


¡Ah! Y que no se me olvida que tengo un cuento torremolinense pendiente de bajar el telón…









Comentarios

  1. Cuántas novedades, Román, me han encantado las fotos, y esas pequeñas anécdotas que comentan. Lo de Saramago me conmueve mucho, gracias por compartirlo con nosotros.

    Un abrazo.

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  2. Hermano, no sé cómo lo haces para llegar a todas partes. Bueno, sí lo sé... Muás.

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  3. ¡¡¡Gracias por compartir tan bellos momentos y tan intensos espacios Literarios!!!
    Un abrazo.

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  4. Me alegra tu ilusión y espero que llegues lejos. Si la cara es el espejo del alma, tienes un alma bella.
    Un abrazo literario.

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  5. Pues sí, a ver si cesan la búsqueda esos editores... A cruzar los deditos. Y gracias por compartir toda esta información. Y ese precioso poema de Koncha y ese bonita historia de María. Que a veces tenemos que creer a los niños...
    Besotes!!!

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  6. Román...y digo yo: ¿cómo haces para tener un día con 48 horas, si los demás mortales disponemos de sólo 24?
    El Boalo :) no está lejos de mi casa ;) pero sigo castigada hasta el año que viene >:(
    Besos serranos
    PS mañana, te cuento;)

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  7. ¡Para que luego digan que ya no hay periodistas especializados!... Eres la perfecta muestra. Esperemos que esos editores aprecien tu trabajo como nosotros lo hacemos.

    Un abrazo.

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  8. Muchas gracias por compartir, contagiar y abrir a todos nosotros ese mundo tuyo en el que ya estamos atrapados... aunque sea en la distancia. Un abrazo.

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  9. Hola Luis! Como verás, al fin lo he conseguido: ya te sigo. Si es que esto de la informática es cuestión de tesón. Qué bonita "vivencia" la de Concha, merecería estar entre las finalistas :). Gracias por acordarte de mí en tu blog. Ya te contaré por mail. QUÉ BUENO HA SIDO ENCONTRAROS

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